El hombre en Bogotá
por Amy Hempel
Tengo la ocurrencia de que soy yo quien debe convencerla de bajar. Lo veo, y sucede así.
Escúchame, le digo a la mujer que está parada al filo del abismo. Sus captores le hicieron dejar de fumar. Cambiaron su dieta y lo pusieron a hacer ejercicio todos los días. Y lo mantuvieron así durante tres meses.
Una vez pagado el rescate y tras ser liberado, su doctor lo examinó. Encontró al hombre en excelentes condiciones de salud. Le repito a la mujer lo que el doctor dijo en ese momento. Que el secuestro fue la mejor cosa que le pudo haber ocurrido al hombre.
* * *
Tal vez ésta no sea una de esas historias hechas para que te arrepientas de saltar. Pero la cuento con la esperanza de que la mujer que está al filo del abismo se plantee una pregunta, la misma que se planteó el hombre en Bogotá. Que cómo sabemos que lo que nos pasa no es bueno.
Traducido por el De-compuesto
6 Comments:
Salaverga, demasiada contundencia para mi frágil mente.
Ya me dí el tiempo para venir a leerte hasta acá.
Buenos, muy buenos cuentos.
Luego dicen que todo sucede para bien.
Me gusto Amy, lástima que no se consiga.
Nos estamos leyendo.
super bueno ese texto, eso mismo es lo ek yo trato de pensar, kuandoalgo ke no me gusta me pasa!!! saludos
quiero enviarte un relato, ponme un mail a metafisicaparatontos@gmail.com
ey me gustaron esos cuentos de Amy.. mm los voy a buscar por aca
muy bueno...corto pero efectivo
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